Ahir al vespre, just quan vaig arribar de Madrid, em vaig assabentar que hi havia un debat a TV3 sobre l’ensenyament. L’hora, després del Polònia, no era segurament la més encertada, ja que tal com va succeir es va allargar fins molt tard, però malgrat tot vaig quedar-m’hi.
La meva opinió és que el debat va estar molt condicionat per les estadístiques aportades pel Cuní i les qüestions que s’hi havien plantejat eren els temes més clàssics d’escola pública, concertada, privada, immigració i altres. Alguns d’ells fins i tot poc precisos per part dels que ho havien plantejat i dels que havien respost.
En el debat s’hi havia convidat tantes persones i tant representatives que va ser més una suma de frases i conceptes a remarcar per part de cadascú que realment un debat que ens aportés conceptes innovadors o plantejaments pel futur.
Personalment el moment menys encarcarat i més fresc el va aportar en Ferran Ferrer quan aprofitant la intervenció de la representant de la USTEC va suggerir que els funcionaris hauríem d’anar on les necessitats educatives ho demandessin. Posar per davant l’alumne que el mestre o professor en la seva elecció. De ben segur que el gir no ha de ser en un sol sentit però segurament tampoc en la posició en la que ens trobem.
Tinc el ple convenciment, com li deia aquesta setmana en la interpel•lació que li he fet a la ministra, que l’escola ha de canviar molt, i molt, en no massa temps, si volem que els alumnes es preparin per afrontar els reptes de la societat del coneixement, ja que coincideixo amb en Ferran Ruiz en el seu llibre “ La nueva educación” que “el sistema en conjunto funciona, pero lo hace de una manera cansina, sin fuelle para mejorar, sin generar profundas satisfacciones en los alumnos, los padres y los profesores”.
I crec que hem de canviar els continguts, ja que molts d’ells els trobaran en llocs més atractius que l’escola, la manera d’ensenyar-los, la motivació per aprendre... i, sense oblidar que a més de bons professionals han de ser bons ciutadans per una societat més equitativa.
Dimarts vaig acabar la interpel•lació reivindicant l’EDUCACIÓ en el marc de l’escola, única institució universal, amb una frase que havia llegit feia poc.
No vaya a ser que nos ocurriese lo que el escritor García Márquez decía de sí mismo :
“Desde muy pequeño tuve que abandonar mi educación para empezar a ir a la escuela”
10.20.2008
CAL REPENSAR L'EDUCACIÓ
En el ple de la setmana passada vaig intervenir per desestimar la moció del PP sobre el fracàs escolar i el malament que va el sistema educatiu des de la llei de la LOGSE i ara la LOE. És un tó i una cantarella que ja coneixem, inamovible i que segons ell sols es resoldrà si apliquem la llei que va fer el PP (per cert que ja està derogada igual com la LOGSE).
Pel proper ple estic preparant una interpel·lació a la Ministra respecte a l'aplicació de la Llei Orgànica d'Educació en els valors democràtics de convivència i d'igualtat d'oportunitats entre dones i homes per a la societat del segle XXI
Text de la meva intervenció
Señorías, la moción consecuencia de interpelación que presentó el señor Abejón a la ministra partía de dos premisas para debatir sobre la educación desde su punto de vista -que ya conocemos-, en la que el sistema más tradicional impera en todo, y tenía dos objetivos: uno, a través del inicio de curso escolar tratar de la asignatura de Educación para la Ciudadanía, nos preocupa que a través de ella se esté planteando lo que ustedes mismos critican, 17 modelos educativos distintos, y se esté enfrentando a los ciudadanos con la administración desde aspectos cuya legalidad deberíamos comprobar y, dos, que aún me preocupa más, poner en la cuña del debate educativo el tema de la lengua.
Como ya le manifesté al terminar la interpelación, me sorprendió que utilizara este tema porque creía que lo entendía y se diferenciaba de algunas otras senadoras, como ya han mencionado algunos senadores, porque en la pregunta que se formuló en comisión, en mi opinión, la senadora Cobaleda faltó incluso al respeto a las comunidades que tenemos una lengua propia.
Me sorprendió que utilizara este tema, pero debió ser que aquella semana correspondía hablar de ello, porque se celebró una manifestación convocada por Ciutadans, a la que acudieron muy pocas personas, y en la que vimos a la senadora Sánchez-Camacho que precisamente había hecho unas declaraciones que nos gustaron indicando que no firmaría el manifiesto de una lengua común, pero después acude a una manifestación convocada por otros; repito, me sorprendió que no la utilizara, y se lo agradezco, porque considero que debemos diferenciar el debate de la educación del de la lengua.
Su moción, que está muy bien estructurada, adolece de una visión muy centralista. En muchos aspectos, lo disfrazan con una frase que dice: «con las comunidades autónomas», pero se trata de la misma visión centralista. Si alguien lee la moción, podría pensar que van a dotar de más dinero a las comunidades autónomas, pero las comunidades autónomas -y en Cataluña lo sabemos bien porque estamos trabajando en ello- quieren una nueva financiación, que sabemos incluye la educación, y que no nos lo darán aunque en las mociones figure y vuelvo a repetir: «con las comunidades autónomas».
Por tanto, votaremos en contra de la moción, lo cual no significa que no estemos preocupados por la educación y porque nuestros alumnos no consigan alcanzar el mismo nivel, pero leemos los informes de otra manera, observando cualitativa y cuantitativamente las cifras, y no por ese orden. No es lo mismo decir que se está en el furgón de cola que decir que se está en el grueso; lo que se cambia son unas décimas en el orden en que se está en estos estudios.
Lo que a nosotros nos preocupa es que, aunque el sistema funciona en conjunto, lo hace de una manera cansina, sin fuelle para mejorar, sin capacidad de generar satisfacciones profundas ni en los alumnos, ni en los padres ni en los profesores. Por esta razón debemos actuar. Les recomiendo un libro que he releído estos últimos días, sobre la nueva educación, que ha escrito Ferran Ruiz Tarragó y que reflexiona sobre el agotamiento del modelo escolar de la era industrial y sobre la necesidad de transformar el sistema educativo para afrontar los retos de la sociedad del conocimiento.
El señor PRESIDENTE: Señoría, termine.
La señora BAIG I TORRAS: Realmente, no se trata de repetir siempre lo mismo, sino de buscar nuevas fórmulas para la educación que den lugar a un nuevo papel para los alumnos y para los profesores, y que busquen la complicidad de los padres.
Muchas gracias, señor presidente.
El señor PRESIDENTE: Gracias, señoría.
Pel proper ple estic preparant una interpel·lació a la Ministra respecte a l'aplicació de la Llei Orgànica d'Educació en els valors democràtics de convivència i d'igualtat d'oportunitats entre dones i homes per a la societat del segle XXI
Text de la meva intervenció
Señorías, la moción consecuencia de interpelación que presentó el señor Abejón a la ministra partía de dos premisas para debatir sobre la educación desde su punto de vista -que ya conocemos-, en la que el sistema más tradicional impera en todo, y tenía dos objetivos: uno, a través del inicio de curso escolar tratar de la asignatura de Educación para la Ciudadanía, nos preocupa que a través de ella se esté planteando lo que ustedes mismos critican, 17 modelos educativos distintos, y se esté enfrentando a los ciudadanos con la administración desde aspectos cuya legalidad deberíamos comprobar y, dos, que aún me preocupa más, poner en la cuña del debate educativo el tema de la lengua.
Como ya le manifesté al terminar la interpelación, me sorprendió que utilizara este tema porque creía que lo entendía y se diferenciaba de algunas otras senadoras, como ya han mencionado algunos senadores, porque en la pregunta que se formuló en comisión, en mi opinión, la senadora Cobaleda faltó incluso al respeto a las comunidades que tenemos una lengua propia.
Me sorprendió que utilizara este tema, pero debió ser que aquella semana correspondía hablar de ello, porque se celebró una manifestación convocada por Ciutadans, a la que acudieron muy pocas personas, y en la que vimos a la senadora Sánchez-Camacho que precisamente había hecho unas declaraciones que nos gustaron indicando que no firmaría el manifiesto de una lengua común, pero después acude a una manifestación convocada por otros; repito, me sorprendió que no la utilizara, y se lo agradezco, porque considero que debemos diferenciar el debate de la educación del de la lengua.
Su moción, que está muy bien estructurada, adolece de una visión muy centralista. En muchos aspectos, lo disfrazan con una frase que dice: «con las comunidades autónomas», pero se trata de la misma visión centralista. Si alguien lee la moción, podría pensar que van a dotar de más dinero a las comunidades autónomas, pero las comunidades autónomas -y en Cataluña lo sabemos bien porque estamos trabajando en ello- quieren una nueva financiación, que sabemos incluye la educación, y que no nos lo darán aunque en las mociones figure y vuelvo a repetir: «con las comunidades autónomas».
Por tanto, votaremos en contra de la moción, lo cual no significa que no estemos preocupados por la educación y porque nuestros alumnos no consigan alcanzar el mismo nivel, pero leemos los informes de otra manera, observando cualitativa y cuantitativamente las cifras, y no por ese orden. No es lo mismo decir que se está en el furgón de cola que decir que se está en el grueso; lo que se cambia son unas décimas en el orden en que se está en estos estudios.
Lo que a nosotros nos preocupa es que, aunque el sistema funciona en conjunto, lo hace de una manera cansina, sin fuelle para mejorar, sin capacidad de generar satisfacciones profundas ni en los alumnos, ni en los padres ni en los profesores. Por esta razón debemos actuar. Les recomiendo un libro que he releído estos últimos días, sobre la nueva educación, que ha escrito Ferran Ruiz Tarragó y que reflexiona sobre el agotamiento del modelo escolar de la era industrial y sobre la necesidad de transformar el sistema educativo para afrontar los retos de la sociedad del conocimiento.
El señor PRESIDENTE: Señoría, termine.
La señora BAIG I TORRAS: Realmente, no se trata de repetir siempre lo mismo, sino de buscar nuevas fórmulas para la educación que den lugar a un nuevo papel para los alumnos y para los profesores, y que busquen la complicidad de los padres.
Muchas gracias, señor presidente.
El señor PRESIDENTE: Gracias, señoría.
10.16.2008
El president Companys
Avui, 15 d’octubre, santa Teresa en el santoral, van assassinar el president Companys ,i, enguany amb la llei de la memòria històrica, la Generalitat de Catalunya juntament amb la seva néta han instat al ministeri perquè iniciï el procés d’anul•lació.
Dimarts en el Senat el ministre de justícia va respondre una pregunta dient que és absolutament solidari amb el cas de Companys, i considera aquest un cas molt especial, d’ assassinat ignominiós del president de la Generalitat de Catalunya i que el Govern d’Espanya tindrà sensibilitat sobrada quan arribi el moment.
Reprodueixo el text exacte que va respondre el Ministre a la pregunta del senador Bofill:
“Señoría, como sabe muy bien, el Gobierno de España es
absolutamente solidario con la cuestión que usted plantea.
Permítame que me adhiera aquí, en nombre del Gobierno,
a la conmemoración que mañana se llevará a cabo de ese
injusto y ruin fusilamiento del presidente Companys. Sabe
su señoría que hemos impulsado una Ley de la memoria
histórica, y le puedo decir que en este momento el decreto
de desarrollo se encuentra en el Consejo de Estado para
el preceptivo informe. Vamos cumpliendo con los pasos
marcados.”
“Es cierto que el presidente Companys es muy especial,
pues fue el único presidente ignominiosamente asesinado
en ese momento. Pero estamos ahí, en el camino hacia la
recuperación de esa memoria, con un reconocimiento
general en la ley de la injusticia de las resoluciones que es
una proclamación solemne, mucho más que simbólica. Y
está también la posibilidad de reconocimientos individualizados
que pilotará el ministerio que dirijo en este instante,
y no le quepa duda de que habrá sensibilidad sobrada
para, llegado el momento —y yo no soy adivino—, estar
en la línea de lo que debe ser, pero con el respeto a lo que
los tribunales y la Fiscalía han de decidir.
Como he dicho, ese decreto de desarrollo está en el
Consejo de Estado, y nos permitirá andar en la dirección
adecuada. He pensado siempre, señor Bofill, que el honor
y la dignidad de las víctimas, de tantas víctimas de aquella
salvajada y de la dictadura que la siguió no menos salvaje,
son inmunes a la injusticia, a la miseria moral y a la
ruindad absoluta de los verdugos. Pero también es verdad
que, aun desde esa inmunidad, en esta ley subyace esa
herramienta para que lo pongamos lo veamos y también
puedan verlo las generaciones venideras. Pero, insisto,
desde la absoluta inmunidad que frente a la ruindad del
verdugo tiene siempre la víctima.”
Dimarts en el Senat el ministre de justícia va respondre una pregunta dient que és absolutament solidari amb el cas de Companys, i considera aquest un cas molt especial, d’ assassinat ignominiós del president de la Generalitat de Catalunya i que el Govern d’Espanya tindrà sensibilitat sobrada quan arribi el moment.
Reprodueixo el text exacte que va respondre el Ministre a la pregunta del senador Bofill:
“Señoría, como sabe muy bien, el Gobierno de España es
absolutamente solidario con la cuestión que usted plantea.
Permítame que me adhiera aquí, en nombre del Gobierno,
a la conmemoración que mañana se llevará a cabo de ese
injusto y ruin fusilamiento del presidente Companys. Sabe
su señoría que hemos impulsado una Ley de la memoria
histórica, y le puedo decir que en este momento el decreto
de desarrollo se encuentra en el Consejo de Estado para
el preceptivo informe. Vamos cumpliendo con los pasos
marcados.”
“Es cierto que el presidente Companys es muy especial,
pues fue el único presidente ignominiosamente asesinado
en ese momento. Pero estamos ahí, en el camino hacia la
recuperación de esa memoria, con un reconocimiento
general en la ley de la injusticia de las resoluciones que es
una proclamación solemne, mucho más que simbólica. Y
está también la posibilidad de reconocimientos individualizados
que pilotará el ministerio que dirijo en este instante,
y no le quepa duda de que habrá sensibilidad sobrada
para, llegado el momento —y yo no soy adivino—, estar
en la línea de lo que debe ser, pero con el respeto a lo que
los tribunales y la Fiscalía han de decidir.
Como he dicho, ese decreto de desarrollo está en el
Consejo de Estado, y nos permitirá andar en la dirección
adecuada. He pensado siempre, señor Bofill, que el honor
y la dignidad de las víctimas, de tantas víctimas de aquella
salvajada y de la dictadura que la siguió no menos salvaje,
son inmunes a la injusticia, a la miseria moral y a la
ruindad absoluta de los verdugos. Pero también es verdad
que, aun desde esa inmunidad, en esta ley subyace esa
herramienta para que lo pongamos lo veamos y también
puedan verlo las generaciones venideras. Pero, insisto,
desde la absoluta inmunidad que frente a la ruindad del
verdugo tiene siempre la víctima.”
JA SOM AVIS
Eren dos quarts de tres del matí quan el meu fill Arcadi ens feia saber que ja érem avis i que tant la mare com el nen (en Magí) estaven bé. Evidentment podria manifestar la nostra alegria, la d’en Pere i jo mateixa, però el que més em va emocionar és la mostra de sentiments i de responsabilitat de l’Arcadi. Els pares acostumem a veure créixer els nostres fills però ens costa reconèixer que ja són grans i madurs per decidir i responsabilitzar-se del seu projecte de vida.
La matinada del dissabte l’Arcadi se’ns va fer gran i ja pot compartir experiències inoblidables com la de ser mare i/o pare. Gràcies, Anna i Arcadi, per fer-nos viure aquest moment, no sols pel naixement d’en Magí, sinó també per comunicar-nos els sentiments. Res hi ha més bonic que la comunicació entre iguals.
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